top of page
Buscar

Como me transformé en una mejor versión de mi misma.

  • Foto del escritor: Blue Mood
    Blue Mood
  • 13 jul 2017
  • 3 Min. de lectura

Este post va a ser un storytime sobre mi cambio a lo largo de los años así que les recomiendo sacar su snack favorito y ponerse cómodos.

Cuando uno escucha adelgazar y bajar de peso al instante lo relaciona con dieta, bajar para lucir un bikini o un buen vestido, matarme de hambre un rato para que me quede esa blusa para una fiesta pero les juro que eso es totalmente erróneo.

La mayoría de personas esta acostumbrada a bajar de peso por apariencia, para verse mejor, y es cierto, la apariencia es importante, nos hace sentir felices el vernos bien pero no es tan importante como tu salud. Por ese motivo empecé yo.

Nunca he sido una persona muy activa, mucho menos me gustaba el deporte, siempre he sido muy floja y siento que aún lo sigo siendo, sin embargo, nunca había sufrido de sobrepeso en mi adolescencia. Toda mi adolescencia fue comida chatarra, fiestas con alcohol y una alimentación no tan saludable , aún así me mantenía en mi peso.

Subí de peso cuando a mis 17 años entré en depresión y sin darme cuenta ya pesaba 59 kilos. Dormía, comía, dormía y volvía a comer.

Añadiéndole mi adicción a las gomitas y que tomaba alcohol todos los fines de semana.

Eso no me afectaba, el verme con “rollos” me daba igual porque me decía a mi misma: “me pongo una chompa y listo” o “usaré ropa negra” , pensando que la ropa negra haría magia y eliminaría mi sobrepeso.

Así pase mi 2014, entre “no tengo tiempo para desayunar” o comeré algo rápido (galletas, jugos altamente azucarados), almuerzos de comida rápida y cenas de más comida rápida. El trabajar y estudiar me hizo pensar que mi alimentación era secundaria y hasta llegaba a comer en un día de almuerzo KFC y en la cena una salchipapa y siempre al lado de mi gaseosa heladita.

Constantemente durante todo el 2015 sufría de migrañas tan agudas que no podía dejar de llorar, sentía náuseas y mareos que hasta el neurólogo me ordenó una tomografía para descartar un aneurisma. Mis exámenes revelaron anemia y un alto nivel de grasa en mi cuerpo, tal ves no era excesivo, pero mi cuerpo no toleraba ese nivel.

Cambié mi alimentación y subí mi hemoglobina pero seguía comiendo esas grasitas que amaba. Hasta que en febrero del 2016 quise arrodillarme para jugar en el piso y no pude. Me dolía demasiado, mis piernas eran muy gordas y eso me generaba hinchazón y dolor. Eso me hizo darme cuenta que tampoco podía sentarme cruzada de piernas y el subir hasta mi casa en el 4 piso de un edificio era una odisea, en el segundo piso necesitaba parar para poder continuar hasta el cuarto piso.

Sí , tal ves 59 kilos les suene una nada pero yo midiendo 1.45 cm estaba lidiando con sobrepeso y sus consecuencias. Ahí fue cuando dije basta, debo hacer algo por mi y quererme porque la apariencia se esconde con ropa pero esos dolores de cabeza no se irán si no cambio mis hábitos. Empecé dejando primero las golosinas y snacks, luego la gaseosa y por último desayunando todos los días sano.

Me volví fan de la avena, adicta a las frutas y ensaladas. Abandone las gomitas y seguí almorzando rico pero ahora comida de casa junto a mis dos litros de agua diaria. Empece ejercitando en casa con videos y recién hace 5 meses entre al gimnasio.

Baje a 45 kilos en 11 meses sin dejar de comer, sin morir de hambre ni sacrificando gustitos, porque no les voy a mentir de ves en cuando me doy mis cheatmeals pero ya no como antes, ahora soy consiente que lo que como influye en mi salud.

Muchas personas creen que no como o dejo de comer para mantenerme en mi peso, o dicen que hago dieta pero no, esto no es dieta, esto se llama comer sano.

No se idealicen con modelos de revista porque nuestro cuerpo es único y tenemos que quererlo como es y aunque fue un largo camino yo ya lo estoy logrando.

No fue fácil, no es fácil, les dirán que no pueden que esa es su contextura, hasta se burlaran de ustedes pero el esfuerzo vale la pena y no solo verán resultados en su salud y en su físico, también en su estado de animo. Les juro que vale la pena cambiar y ser mejores para nosotros mismos.

La calidad de vida es esencial y el amor propio es la clave y el primer paso de todo.

No dejes que nadie te diga que no puedes.

No te conformes.


 
 
 

Commentaires


Entradas destacadas
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
Síguenos
  • Instagram Social Icon
  • Facebook Basic Square

© 2017 Blue Mood by Cas & Mafer Vásquez.

bottom of page